Cómo pasé de tomar mate en Uruguay a vestir Armani en Dubai
Lo que predico en este blog lo llevo a mi vida, por más que mucha gente piense que es imposible. Hace algo más de dos años compartía la experiencia del desapego físico y cómo me había desecho de casi todas mis posesiones (desapego material). Empecé un camino en Uruguay, uno de los mejores momentos de mi vida, pues estará siempre reflejado por la experiencia de poder criar a mi hijo en primera persona. Aquí he podido compartir muchas experiencias fabulosas de Uruguay, aunque debo reconocer que ha habido algún que otro descosido. Mi conclusión final es que Uruguay es un país maravilloso, pero que en lo laboral puede resultar mediocre. Casi la totalidad de los alumnos que tuve siempre indicaban que para llegar a algo en la vida, había que irse del país. ¿Y eso cómo puede ser?
En Uruguay probé el mate por primera vez y me sorprendió que fuera una bebida que realmente acerca a la gente a compartir muchos momentos. Pero esa visión que tienen de compartir es un poco fachada, porque la realidad es que en el camino me encontré muchas personas super envidiosas y competitivas. Pero competitivas en hacer las cosas con el menor esfuerzo posible y encargándose de que los demás no las hagan. Vamos, lo que venía a llamar el derecho de piso y cuidar la chacra que ya describí.
Cuando uno llega a Uruguay comprueba rápidamente que no hay desempleo, aunque la realidad es que hay mucho empleo de baja calidad y el de alta remuneración queda reservado para ciertas personas que tienen contactos. Según todas –¡TODAS!- las personas con las que tuve ocasión de conversar en mis primeros meses en Uruguay, parecía una misión sencilla encontrar un buen trabajo. -"Español, ingeniero, con un MBA"-… ¡me querían con locura! Falso. Ni a las entrevistas me llamaban.
El ser un coach certificado, que se supone que tenía mucha demanda, marcó mi primera decepción. Al igual que en España, este tipo de servicios en empresas no está relacionado con la calidad sino con el “mamoneo” de los contactos. Por más certificaciones que quieras llevar en el bolsillo, muchas veces las empresas contratan a alguien que ha recomendado otro, como parece bastante lógico… aunque la inversión a largo plazo dejará mucho que desear.
Dentro de mi experiencia laboral y como buen conferenciante en empresas, tuve ocasión de dar clases de felicidad en la prestigiosa Universidad Católica del Uruguay (UCU) que prioriza al alumno con dinero frente a la calidad y el rigor de la enseñanza, fuera de la linea de la Universidad Católica de Chile. Nunca me imaginé encontrar docentes empeñados en defender su chacra (me reservo esta historia, porque si muestro cómo pusieron en duda mi valía como profesor solo con la opinión de algunos alumnos, más de uno se podría llevar las manos a la cabeza). Mejor fue mi experiencia en la Universidad de la Empresa, que muchos consideran de peor nivel que otras, pero que desde mi punto de vista tiene la mejor relación calidad/precio de las mencionadas. Mi opinión, basada en mi humilde experiencia, es que a la Universidad de la Empresa van muchos alumnos a aprender, mientras que en otras privadas van muchos hijos de papá y mamá a por un título. La diferencia creo que es obvia.
Uruguay ofrece laboralmente la experiencia de vivir muchos diálogos de besugos. Las personas que tenemos un mínimo de criterio profesional ofrecemos argumentos para ejecutar cualquier acción, una incompetente profesional pero los incompetentes sólo dan explicaciones banales como “yo de esto sé mucho porque llevo haciéndolo 30 años”, “aquí en este país las cosas son como digo yo”, “tú de esto no sabes nada así que mejor escucha mi opinión”, “a mí no me vas a decir cómo hacer las cosas”.
De los mejores momentos especiales de la vida recordaré siempre de la experta número uno mundial y gran conocida en su casa, Doña Mariela Marenco (le pongo el doña no por educación, sino por su elevada edad). Es una experta ¡que tiene títulos falsos! Si se rasca un poco se verá que tiene una “supuesta” licenciatura en Marketing, en un sitio que ni nombra… ¡porque no la tiene! Y además es coordinadora de programas en un sitio en donde se los asigna ella y parece que ningún gerente es capaz de entender que “el que parte y reparte se lleva la mejor parte” (es una de las prácticas prohibidas en cualquier empresa que tenga un mínimo código de RSC). Doña Mariela Marenco imparte clases de Estrategia Empresarial sin haber tenido ningún cargo de responsabilidad de una empresa (más allá de ser autónoma), de marketing digital sin tener la menor idea de tecnología 3.0 (su web es su peor escaparate), o de todo lo que se le ocurre. Que nadie la discuta… ¡porque ella lo sabe todo y además ha escrito dos libros! (autopublicados, claro) (aquí más información).
Este nivel de mediocridad laboral me llevó a entrar en el modo “supervivencia” que conocen la mayoría de los uruguayos, y que consiste en mal vivir para llegar a final de mes. Da igual si tienes mucha más formación y experiencia que tus compañeros. Si no tienes los contactos, “estás en el horno”, como les gusta decir. Allí se trabaja mucho eso de tener un amigo político y otro banquero. Cuestión muy latina, pero que cuanto más pequeño es el país, más se conciencia uno del tema.
En los últimos 18 meses he pasado por nueve lugares, por curioso que parezca, y simplemente por el hecho de no tener disponibilidad crediticia (llegas de nuevas a un país). Nunca le dije a nadie “esto es una mierda yo me merezco mucho más”. Es la frase más simplona que escucho en multitud de ocasiones. Personalmente soy de la opinión de que cuando vivimos buenas temporadas, ¡nos lo merecemos!, pero cuando nos toca pasar por algo malo… ¡también nos lo merecemos!
En Dubai, como vestir adecuadamente es fundamental para adaptarse a la cultura y las expectativas de este país. A medida que exploras las calles de esta vibrante ciudad, notarás que el estilo de vestimenta refleja el lujo y la sofisticación que Dubai ofrece. Cuando se trata de vestirse en Dubai, es importante tener en cuenta las normas culturales y religiosas. Aunque Dubai es considerado uno de los destinos más abiertos y tolerantes en el Medio Oriente, aún hay algunas pautas que debes seguir. Es común ver a las mujeres vestidas con abayas, una túnica larga y suelta que cubre su cuerpo, combinada con un hijab para cubrir su cabello.
Sin embargo, no es obligatorio para las mujeres extranjeras usar abayas, pero se les recomienda vestirse de manera modesta y respetuosa. En cuanto a los hombres, se espera que vistan pantalones largos y camisas de manga larga en lugares públicos y más formales. Evitar usar ropa ajustada o reveladora es una consideración importante para no llamar la atención no deseada y respetar las tradiciones locales. Dubai es conocido por su amor a las marcas de diseño y la moda de alta gama. Puedes encontrar una amplia variedad de boutiques exclusivas y centros comerciales llenos de las últimas tendencias internacionales. Por lo quieres destacar en este ambiente competitivo de estilo y envidia, aunque a otro nivel de Uruguay, es posible que desees invertir en algunas prendas elegantes y de calidad. En este video te muestro los trajes típicos locales de emiratís.
Al final entendí que si quería un trabajo con mi perfil profesional, quizás no estaba en el país adecuado. Son cosas que comparto en mis conferencias… por más motivación que tengas, ¡tienes que estar en el contexto adecuado! es mi casa, porque a mí me parece uno de los mejores países del mundo. Aunque laboralmente no sea lo mío y por eso me he venido unos meses a un proyecto a comprobar el sueldo mínimo en Dubai. Otro país, otro enfoque, otra cultura. Aquí puedo llevar otra vez un traje Armani sin que tenga que ver caras de mala envidia. Porque quizás me lo merezca. Porque quizás he trabajado mucho y las empresas valoran lo que puedo aportar.
¿Crees que estás en sitio adecuado haciendo lo adecuado? ¿O sólo estás sobreviviendo? ¿Quieres mate? ¿O prefieres Armani? Quizás sea mejor que intentes cambiar de contexto si ves que la gente no cambia.
NOTA OCTUBRE 2015: La Señora Mariela Marenco manda una carta al proveedor de este hosting amenazando con emprender acciones legales por injurias hacia su persona (ver aquí el documento). Curiosamente no indica en qué se la injuria ni ofrece prueba alguna contra lo argumentado aquí, pero eso sí, se permite injuriar al mensajero con sin más (¡hasta se inventa una asociación de coaching que no existe!). Sin duda, la mentira es el arma de los cobardes ¡Toda una reafirmación de sus malas prácticas!
Aquí verás cómo emigré de Uruguay a vivir en DUBAI (mira la vida en Dubai), motivado por incompetentes como la falsa licenciada Mariela Marenco ¿estás en el contexto adecuado?
Esta web usa galletitas
Ver reflexiones y comentarios
Naoll, muchas gracias por compartir su experiencia en el blog. He tenido oportunidad de dar formación en dos universidades en Uruguay (una la conozco muy bien), y en distintas universidades de España. Desde mi punto de vista creo que tienen diferencias importantes. En tu comentario además veo que hablas de Europa como si todos los países tuviéramos el mimo nivel en la educación universitaria, cuando la realidad es que existen diferencias significativas.
Por último, si de verdad piensas que en Uruguay (y en muchos países de latino-américa) los títulos no son importantes, es que has vivido en otro planeta. Sólo te indico que en Uruguay se pone delante del nombre si eres licenciado, o ingeniero, o magister, etc... si eso es no tener importancia... ¡pues de puta madre!
Yo soy francés, trabajé en toda america latina, viví en URUGUAY y trabajé para una empresa española 10 años (de la cual me acabo de ir muy feliz - FCC). El problema tuyo lamentablemente es que llegaste a URUGUAY con la mentalidad española habitual del contestador de siglos pasados. Ingeniero con MBA, de puta madre !!! pues en URUGUAY hay y de los mejores, quizás no te enteraste que URUGUAY tiene un nivel de educación igual a Europa y que los españoles no tienen nada que enseñar así que los títulos no son lo que hacen la diferencia. Quizás deberías probar USA cuando tengas un momento para terminar de aprender. Que tengas suerte y por favor sea menos presumido español en AMERICA letona...
Lo de la envidia es impresionante, ahora que mi esposa y yo conseguimos trabajo, parece que los vecinos hasta hacen magia negra o voodoo en nuestra contra. Veo la envidia en sus ojos y veo que las personas de acá son iguales que en mi pais, Brasil: doble cara. Todo es besito y sonrisas, pero si surge la oportunidad, acaban contigo. Y no sabrás quien fue, porque la persona seguirá sentando en tu sofá y tomando tu café. Total, decidimos volver a Brasil, hacer otra carrera y intentar ir a vivir en un pais mejor, ojalá nos salga bien.
Muy interesante lo que escribís, me siento reflejado con algunos pensamientos. Pero me queda pendiente la historia que promete el título. Saludos
es bueno saber que con todos esos videos motivacionales que tienes no has podido superar al Uruguay. saludo a todos los que sobrevivimos en este país... con todas las verdades que dijiste y reflexiono: yo no me puedo ir, pero si pudiera me iría a la misma m...
No se trata de superar o ganar. Se trata de saber estar donde más te gusta.
Muchas gracias por su comentario.
He disfrutado mucho este blog.....a pesar de que las experiencias pueden ser diferentes debo reconocer que muchos de tus comentarios los he percibido....Uruguay es maravilloso, el mejor país para vivir, pero en lo laboral es pequeño y con un acotado campo ocupacional...
Reí mucho al darme cuenta que a pesar de que muchos me decían, extranjera, buena presencia, buen curriculum.....ni para una entrevista me llamaron.....ahora veo que mi experiencia no era la única....en fin he vivido muchas de las peripecias que señalas.....pero he sido tan feliz en Uruguay y he encontrado tantas cosas que creía perdidas, que aquí sigo, no sé por cuanto tiempo, pero si tengo claro que de regresar a mi país, será solo por trabajo.....y será para volver.......?
Excelente descripción.
Me vine a España hace mas de una década, mi país es España, lo digo con convencimiento y orgullo. El Uruguay me frustró, me robó tiempo, me desengañó de ese mito de país acogedor y de gente educada. Amigos verdaderos los cuento con los dedos de una mano y me sobran varios dedos, el uruguayo promedio es envidioso y falso,solo que lo disimula bien.
Es un país pequeño, con una economía que no despega de los agropecuario y creo que no despegará nunca de ahí, ofrece pocas oportunidades y las que ofrece ya están copadas por clanes familiares y amiguismo.
Viven de los mitos que les han generado a lo largo de la historia, ( país educado, Maracaná, país natural, como el Uruguay no hay) pero lo cierto es que la gente subsiste, no pueden plantearse elevar la cabeza un poquito mas arriba porque o le dan el palo los prejuicios de los envidiosos que los rodean o la situación de economía de subsistencia en que viven.
Saludos
Comparto su pensamiento sobre nuestro país, en la mayoría de los trabajos como el personal no es calificado y solo suma puntos por ser amigo del jefe, o del amigo, o algún otro adulador se empeñan en hacerle la vida imposible al otro, no importa si trabajas mejor en 2 años que una persona en 30, automáticamente te conviertes en carne de cañon, tienes que "aclimatarte" a la mediocridad. El nivel de vida es carisimo, sumado a las grandes carencias culturales en el país más alfabetizado de América Latina son enormes, a veces me pongo a pensar, si "Uruguay es el mejor país ?" Qué será del resto!!?? Igualmente para un uruguayo sea ingeniero o de cualquier orientación al irse del país muy pocas veces puede trabajar en su ramo, muchas veces porque los niveles de estudio no se comparan, y otras porque al estar acostumbrado a vivir con menos trabajamos en cualquier ramo que para nosotros se nos remunere bien y nos de una vida totalmente distinta. Yo soy uno más del montón y como no soy un nene de mamá imaginate para poder estudiar algo y encima trabajando... Qué tenga muchos exitos y espero en breve (al ritmo que voy en la carrera de ingeniería de 5 años me deben quedar 10) llamarlo colega.
Hola Pedro, comparto mucho de lo que has puesto en este artículo y no es privativo de Uruguay, sino que se extiende a varios países. Soy argentino y hace algunos años vine a vivir a Uruguay, un lugar maravilloso, tal como mi país de origen. Trabajé durante 27 años en una institución religiosa educativa y estudié en la UNLM, como Periodista en Bs As. Seguramente muchos de los participantes en esta conversación estarán de acuerdo que el sistema educativo en general, en nuestros países, ha decaído notablemente, y que la cultura del trabajo no es realzada como en las generaciones de nuestros abuelos. Mucho tienen que ver las distintas vertientes políticas que nos han gobernado, ya que está en ellos diseñar los diferentes estamentos de enseñanza para ocupar un lugar en el mundo de hoy, donde el conocimiento, las TIC y la investigación, hacen la diferencia. Es verdad que el amiguismo, especialmente en comunidades más pequeñas, determina que muchas veces las posiciones laborales sean ocupadas por personas menos capacitadas y eso provoca un resultado final de menor calidad. Creo que se ha igualado para abajo, en vez de elevar a los más débiles y también hay una cierta (y falsa) "lucha de clases", donde el deseo de éxito y progreso se asocia a valores "deshumanizados", mientras los dirigentes políticos llenan sus bolsillos. También hay mucho chanta en todos los rubros, y la falta de penalización y control lo fomenta.
Especialmente en el tema Coaching, la diferencia en su institucionalización académica como si la tienen la Ingeniería, Medicina, Sicología y otras mas, alienta el chantaje y la proliferación de Institutos, Confederaciones y demás instituciones que se acreditan y certifican a sí mismas y entre ellas, dando lugar a improvisación, falta de profesionalismo y "manochantas"
Ahora, volviendo a algunos temas de tu artículo, resalto nuevamente que el sistema imperante en este país, incide en las personas para que no despeguen, salvo algunos que mediante su esfuerzo y demás virtudes logran hacerlo. La burocracia, la altísima carga impositiva, la maraña de regulaciones que se contradicen y la ideología imperante son temas a vencer.
Por otra parte, valoro que la gente no piense "solo" en trabajar, sino también, en dedicar tiempo a la familia, sus intereses personales y la recreación. Es muy interesante el logro del equilibrio para hacer todo sin resignar nada.
Personalmente, mi experiencia en la praxis como facilitador, mentor o coach durante tantos años, me indican que cada quién debe descubrir qué es lo que desea y le hace más feliz, que al fin y al cabo, ese es el propósito para el cual uno vino a la tierra, según creo. Debido a esto, es sumamente respetable si uno es feliz con poco de lo material, mate en mano y pies en el arroyo o viceversa.
En mi caso, resigné mucho de lo material en Argentina, para vivir con bastante menos en Piriápolis, pero pudiendo criar a mis hijas sin la constante preocupación que la inseguridad, la confrontación diaria y la intolerancia traían como el pan de cada día.
Uruguay ofrece aún cosas que es difícil conseguir en otro lado, por lo cual estoy muy agradecido al país, por brindarmelas tan abundantemente, reconociendo que en la parte económica, y por variables de las cuales mencioné solo algunas, es un país que expulsa mentes capacitadas porque no ofrece desarrollo económico y profesional sustentable y duradero en el tiempo para todos los graduados, que son muchos más de los que encuentran trabajo adecuado. Esto se ve al ser el estado en sus distintas variantes, el mayor empleador, con 500 mil personas que viven de el, en un país con poco mas de 3 millones de habitantes.
Pero, aún así, siempre hay lugar para soñar, prepararse y elegir qué tipo de vida uno quiere vivir, partiendo de saber quién somos, qué queremos y cómo obtenerlo.
Bien, no quiero abrumarles con tanto palabrerío, pero ha sido un placer leer sus opiniones. Un abrazo
Me fui del Uruguay en final de 1972. anduve por todo el mundo y pare en Brasil hace 40 anos, donde crie una familia. Todo o que se dijo aqui sobre la envidia y otras cosas parcidas, parece que son aplicables a las pesonas de Brasil. Claro que existe gente ruin hasta en el fin del mundo. No entanto, nunca deje de ser uruguayo, a pesar de que mi esposa, hijos y nietos son brasileiros. Consegui trabajar y vivir por 40 anos en Brasil. Pero si pudiera, volveria.