Aquí tienes los mejores ejemplos con metáforas y reflexiones que no te dejarán indiferente. Sigue leyendo...
El verbo querer y tener son verbos muy fáciles de conjugar, pero que no siempre llevan a la misma expresión. El verbo querer es de los que más me gusta escuchar en las personas.
Existe una acepción más curiosa aún, una reflexión importante que merece la pena, y que se conjugaría así:
Hasta que te aburres, hasta que te das cuenta de que te están lavando la cabeza con en continuo consumismo, y entonces te atreves a cambiar un poco las cosas.
Será muy sencillo de conjugar, ¿pero por qué cuesta tanto de poner en práctica?
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